La creación de una Reserva Natural evitó la extinción de sus especies en los Andes colombianos
Los Andes tropicales son reconocidos como una de las regiones con mayor biodiversidad del mundo, albergan más del 10 % de la diversidad biológica del planeta. Unos dos millones de especies de plantas, animales, hongos y microorganismos, de las cuales solo el 10 % han sido identificadas.
La niebla que envuelve estos bosques nubosos montanos cuando el aire cálido se encuentra con las corrientes más frías de las montañas crea las condiciones para la vida. En particular, el clima es ideal para orquídeas, palmeras, helechos y epífitas. De hecho, aquí ya se han encontrado y catalogado más de 200 especies de orquídeas. En estos abundan los colibríes, con 34 especies diferentes, 14 de las cuales son especies amenazadas de la Lista Roja de la UICN. También hay 43 especies de tangaras y 40 especies de papamoscas.
Sin embargo, los Andes tropicales del norte han llegado a perder casi el 75% de su hábitat natural, en gran parte, debido a la expansión agrícola. Esto puso en peligro a 100.000 hectáreas de selva tropical de la principal cadena andina. De haber sucedido, las poblaciones de muchos grandes mamíferos, como los osos de anteojos, los pumas, los jaguares y los ocelotes podrían haber sido demasiado bajas como para sobrevivir.
La Reserva Natural “La Mesenia-Paramillo” en los Andes colombianos intenta evitar la amenaza mediante la restauración de 3.500 hectáreas de tierra degradada y la conexión de alrededor de 100.000 hectáreas de bosque intacto, con la principal cadena andina como corredor ecológico.
Hasta hace unos años, toda esta zona estaba prohibida debido a la actividad de las FARC. Aprovecharon el acuerdo de paz de Colombia para evaluar las oportunidades de conservación del área.
Un Proyecto de restauración de los Andes Colombianos
En 2008, Hummingbird Conservancy adquirió su primer terreno agrícola de 280 hectáreas y, en los siguientes 13 años, compró otras 3.500 hectáreas de tierra, gracias a la financiación de Saving Nature, el Fondo de Adquisición de Tierras de los Países Bajos de la UICN y la filial estadounidense de Hummingbird Conservancy.
Saving Nature está trabajando con Hummingbird Conservancy para proteger, conectar y restaurar las áreas más importantes para la biodiversidad. Puesto que la mayoría de las tierras adquiridas eran bosques y pastizales, se propuso la recuperación natural de estos últimos durante los primeros tres años. Estos pastizales degradados destinados al ganado fueron rápidamente reforestados con especies de árboles nativos.
El regreso de la fauna
Desde el lanzamiento del proyecto, se han logrado avances significativos en la conexión, protección y restauración de áreas forestales fragmentadas. Conectaron 100,000 hectáreas de bosque con un corredor de vida silvestre de 1,528 hectáreas. Incluso en un bosque de solo seis años, ya hemos visto cómo especies como pumas y ocelotes reclaman su hábitat.
Al principio, los lugareños consideraban que la Reserva Natural La Mesenia-Paramillo estaba disociada de su comunidad. Sin embargo, esa actitud cambió cuando vieron que el lugar no solo beneficiaba en forma directa a la comunidad, sino que también la involucraba activamente. Ahora, se sienten parte de ella.