Estos Jeans están hechos de plásticos recolectados de los océanos
En 2007, Thomas Huriez, un ex ingeniero de TI, abrió una tienda de moda sustentable en la casa de su familia. Como era informático, aprendió el oficio de comerciante en el trabajo, y después de los tres años que fueron necesarios para dominar la profesión, sus proveedores cerraron.
En el año 2013 Thomas y su hermano Grégoire decidieron crear su propia marca de moda llamada 1083. La marca ofrece una selección de jeans y zapatillas de deporte de diseño ecológico hechos en Francia.
Mil ochenta y tres kilómetros es la distancia entre las 2 ciudades más distantes de Francia, desde Porspoder en Bretaña hasta Menton. Uno de sus objetivos es reducir la huella de carbono. Gracias al crowdfunding, el ecodiseño y la reubicación de todas las etapas en la fabricación de jeans y zapatos, 1083 ya ha creado cerca de 150 empleos, incluidos 70 empleos directos.
Eligieron el “Jean”, porque es un producto que todos usan y podría llegar a tener un gran alcance. Fabricar un producto que respete al medio ambiente y que este hecho en Francia es un gran desafio.
Una de sus creaciones son los jeans “infinitos” reciclables y retornables hechos de desechos plásticos recolectados de los océanos.
Todos los jeans están hechos de algodón orgánico o materiales reciclados y están certificados como «Origine France Garantie», una etiqueta que garantiza que más del 50% del precio de costo del producto permanece en Francia y que el producto adquiere sus características esenciales en Francia. En 1083, el 97% del precio se destina a la economía local.
Mientras que el reciclaje consiste en reutilizar lo que puede ser un producto antiguo para hacer otra cosa, en la economía circular cada producto nuevo se diseña de tal manera que se convierte, al final de su vida, en la materia prima de un nuevo producto nuevo.
¿Cuál fue el impacto de la crisis sanitaria en 1083?
Thomas dice: “La pandemia ha acelerado la transición para muchos consumidores. Hemos experimentado un crecimiento más fuerte desde Covid-19, aunque ya estábamos creciendo en el orden de 30 a 40% por año”.
La pandemia de Covid-19 ha puesto en duda nuestros hábitos de consumo, colocando la moda eco-responsable y los productos locales, como foco de interés.
Cada vez son más los consumidores que quieren comprar local, con total transparencia, porque tiene sentido, y poco a poco deciden cambiar de vestuario, ir a otras marcas o cambiar sus hábitos. Todas las marcas que forman parte de un enfoque eco-responsable han progresado o progresarán gracias a la conciencia que sigue a la crisis del Covid-19.
De una marca de ropa surgió un libro
Cuando se dio a conocer la propuesta de 1083, Thomas Huriez comenzó a recibir muchas llamadas para dar conferencias sobre el proceso de producción, pero Thomas no se podía multiplicar para dar conferencias, especialmente porque en la fabrica de 1083 están desarrollando nuevos proyectos como la producción de algodón a través del reciclaje de jeans viejos y la construcción de una nueva fábrica. Así que eligió llevar su mensaje a través de un libro. Explicó en el libro todo lo que sucede en 1083 y todo lo que han hecho en 7 años.