Joven Creó un aire acondicionado natural, de bajo costo y cero emisiones
Ciertamente hay muchos electrodomésticos en casa que son necesarios para nuestro día en día, y entre ellos podemos encontrar los aires acondicionados. Esos aparatos que necesitamos en cualquier época del año porque nos ayudan a enfriar los ambientes cuando hay calor y calentarnos cuando hay frío.
Sin embargo, el aire acondicionado moderno crea un círculo vicioso del que es difícil salir, porque mientras mas energía eléctrica absorbe, más hidrofluorocarbonos emite. Todo esto provoca que cada vez haga más calor en el ambiente lo que hace que más necesitemos usarlo.
Por suerte, una empresa india de arquitectura ha encontrado una solución favorable a este inconveniente.
Un aire acondicionado basado en la antigua tecnología egipcia.
Esta revolucionaria idea de un sistema de refrigeración natural, al aire libre, fue concebida en una fabrica de Nueva Delhi donde hace un calor sofocante y en donde Monish Siripurapu tuvo un ataque de inspiración.
Resulta que en la fábrica había un enorme generador diésel que aumentaba el calor hasta los 50°C y eso estaba afectando el trabajo y la salud de los empleados. Y buscando la manera de filtrar esta emisión de calor pudo crear un aire acondicionado natural basado en la antigua tecnología egipcia.
Dicha tecnología aprovecha dos conceptos: por un lado, el del enfriamiento evaporatorio y por otro lado el de intercambio de aire lo que da como resultado un sistema capaz de enfriar el aire hasta en 25° solo por usar el agua corriente que circula por tubos de terracota.
“Es una innovación muy simple. En India y en otros lugares todavía utilizamos ollas tradicionales de terracota para enfriar el agua. Usamos el mismo concepto. Cuando el aire pasa a través de los conos de terracota y luego sale, se enfría naturalmente de la misma forma que el agua se mantiene fría en la olla”, dice Siripurapu.
La estructura del aire se encuentra inspirada en las colmenas
Monish es el fundador y arquitecto principal de Ant Studio, y fue el desarrollador de CoolAnt. El sistema se compone de una red de tubos de terracota los cuales, inspirados en la estructura de una colmena, se apilan unos encima de otros en direcciones alternas.
Cuando el agua desciende por la estructura de los tubos gracias a una bomba eléctrica en la superficie de la estructura (basta con mojar los conos una o dos veces al día) para que las unidades de terracota puedan absorber el agua, que luego se filtra al exterior en donde se evapora y se convierte en aire frio.
Este prototipo es capaz de enfriar la gran fabrica que lo inspiró desde sus 50° habituales hasta menos de 36° alrededor de su estructura. Aunque todavía suena bastante caliente una reducción de 15° es un buen comienzo para reducir la carga de las unidades de aire acondicionado tradicionales significativamente.
El sistema funciona tanto en interiores como en exteriores y funciona mejor cuando hay una brisa o aire moviéndose a través de ella. Cerca de una ventana abierta, por ejemplo.
Otro punto a favor es que Monish eligió la terracota porque es un material robusto y maleable, buscando evitar a toda costa el plástico.