Jóvenes transforman conchas de mar abandonadas por pesqueros en biomaterial valioso
Año tras año, más de 7 millones de toneladas de conchas marinas son descartadas por la industria pesquera. Aunque una parte es reutilizada para producir fertilizante, la gran mayoría se encuentra abandonada a lo largo de las costas de todo el mundo, creando montículos con mal olor.
Afortunadamente, Newtab-22 reconoce que las conchas marinas son un material con demasiado potencial, compuestas en más del 90% por carbonato de calcio, un material muy parecido al que contiene la piedra caliza, y que además se considera un biomaterial valioso.
Según Newtab-22, este material llamado Sea Stone es una alternativa sostenible al hormigón que se puede utilizar en la fabricación de productos a pequeña escala.
«Sea Stone propone el uso de conchas marinas desechadas para crear material ambiental y económicamente sostenible en lugar de contribuir al problema de la basura en el mundo».
Método de fabricación de la Sea Stone.
El material está hecho prácticamente de conchas marinas desechadas, que son procesadas, trituradas y mezcladas con aglutinantes minerales no tóxicos, arena y naturales siguiendo una receta que se ha probado por más de un año. Resultando en una apariencia similar al granito.
La fabricación de la Sea Stone se realiza manualmente, para evitar el uso de calor, electricidad y tratamientos químicos. Todo con el fin de garantizar que el proceso sea lo más sostenible y asequible posible.
Todo este proceso manual permite obtener distintas variaciones de tamaños, texturas y colores, logrando que cada pieza Sea Stone sea única en su estilo.
“Estamos interesados en materiales naturales, nuevos o pasados por alto”, dijo Newtab-22. “Buscamos las propiedades beneficiosas e intrigantes de los materiales, tratando de llevarlos a la vida moderna con nuestro diseño. Nuestros resultados apuntan a enfoques críticos para la sostenibilidad y la importancia para la sociedad”.
¿Para qué se puede utilizar la Sea Stone?
La empresa ha experimentado con una gran variedad de aglutinantes naturales, tales como el azúcar y el agar. Ya los materiales se desarrollan con fines comerciales y se ha podido utilizar para fabricar productos como las baldosas decorativas, encimeras, zócalos y jarrones.
Sin embargo, no parece factible que este material se pueda utilizar como alternativa para proyectos estructurales o de gran escala debido a que para replicar la resistencia del hormigón tradicional que se requiere en este tipo de proyectos se necesitaría un proceso de calentamiento de muy alto consumo energético.
Básicamente, este proceso sería similar a la fabricación del cemento, lo que le quitaría su factor sostenible. El poder del material es diferente», explicó a Dezeen Hyein Choi, cofundador de Newtab-22. «No queremos dañar el medio ambiente en el proceso o el resultado».
«Si pones mucha energía y costo, es muy posible usar Sea Stone como cemento real. Es paradójico y controvertido, creemos, ya que esto conduce a una contaminación secundaria», agregó.
Por ahora, la empresa seguirá cumpliendo su propósito de Sea Stone: Darles un nuevo uso a las conchas marinas. Desde los escombros hasta hermosos objetos que sirven de decoración para muchos hogares.